
Tras partir de Uetersen el 13 de mayo, Rust repostó su avioneta Cessna 172B (D-ECJB) alquilada la mañana del 28 de mayo de 1987 en el aeropuerto de Helsinki-Malmi. Informó al control de tráfico aéreo que su destino era Estocolmo, pero modificó su rumbo hacia el este para desaparecer del espacio aéreo finés a la altura de Sipoo con dirección a las costas del Báltico, virando finalmente hacia Moscú. Penetró en la Unión Soviética en un día festivo de los guardias fronterizos, volando directamente hacia Moscú, donde aterriza en la Plaza Roja, siendo posteriormente arrestado por oficiales del KGB.
Nunca lo reveló, pero para los entendidos, desde la costa Báltica sólo había que volar sobre el tramo de la vía férrea para llegar a Moscú, a una altura muy escasa, fuera del alcance de los radares de la defensa antiaérea.

El juicio a Rust comenzó en Moscú el 2 de septiembre de 1987. Es condenado a cuatro años de trabajos forzados por delitos leves de gamberrismo, violación de las leyes de aviación civil y de las fronteras soviéticas. Tras permanecer en prisión 432 días en la cárcel moscovita de Lefortovo, es puesto en libertad condicional. Vuelve a Alemania occidental el 3 de agosto de 1988 después de que el secretario de estado Andréi Gromyko, actuando como presidente del Soviet Supremo de la URSS, firmase el documento que permitió a Rust recuperar su libertad.
Fuente:
http://es.wikipedia.org/wiki/Mathias_Rust
Ya es raro que no lo mandaran a algún gulag de Siberia.
ResponderEliminarHa tenido suerte este chico de salir con vida de esta historia...
ResponderEliminarSiempre hay gente para todo, y para cosas como ésta, más de las que parece (y cuando uno menos se lo espera...)
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