Aunque he visto por ahí que es más antiguo, Cheminova se puso de moda aquí a mediados de los 80.
Se trata de un juego para hacer experimentos químicos. En la caja venían todos los bártulos para montarte un laboratorio casero, como tubos de ensayo, un mechero para calentar las mezclas, una pinza para sujetar los tubos y no quemarte, etc. Y un montón de botecitos con diferentes productos, que si cloruro de no sé qué, permanganato de no sé cuantos... en fin, todo lo necesario para hacer saltar por los aires tu casa.
No podía faltar el libro de instrucciones, donde te explicaban cómo se hacían los experimentos. Allí venían un montón de recetas del tipo: "Mezcla una cucharada de tal cosa con dos medidas de agua y ponlo a hervir. Verás cómo al hacer reacción cambia de color. O salen burbujitas". Y cosas así.
Era el típico juego que si lo pedías te lo compraban, porque al ver que mostrabas cierto interés por un juego de química ya te imaginaban recogiendo el Nobel. Hasta que pasaban un par de semanas y te cansabas de ver cómo los liquiditos cambiaban de color, además de que después de usarlo tenías que fregar todos los tubitos.
Y cuando se te vaciaban los botecitos ya lo podías tirar.
ResponderEliminarClaro porque esos potingues no los encontrabas luego en ninguna tienda.
ResponderEliminarMe encanta tu blog, que tiempo, que recuerdos.
ResponderEliminarPasa ha estar en mi lista de blogs favoritos.
Un saludito.
Es que el mundo de la química es muy duro! Pues no cuesta ná limpiar tubos...
ResponderEliminarJajaja, como recuerdo este juguete, aquí en México se llamaba "Juego de química" e hice "grandes experimentos" como crear jabón, hacer una ustancia para enviar mensajes secretos, y uno fallido que era crear "cristales" jamás me salió.
ResponderEliminarBuen blog, ya te sigo.
A mi me regalaron el Quimicefa por la comunión, y fue en el 79...
ResponderEliminarQue entrañable, que recurdos
ResponderEliminarRecuerdo que invente una sustancia llamada pringui-pringui a base de
Permanganato Potasico y se la echaba por encima a mis amiguitos y despues las manchas de la ropa (y de las manos) no se quitaban de ninguna manera, finalmente uno de mis amiguitos llego a casa todo rojo y sus padres creyeron que era sangre que le habia hecho algo y me querian matar...
en fin que recuerdos tan entrañables.
A mí me lo regalaron los Reyes Magos, y sólo lo podía "ver" y "tocar" en presencia de mi padre o persona mayor. Qué tiempos. Fue lo que me hizo inclinarme por las Letras y dejar la ciencia para los mayores.
ResponderEliminaryo tambien lo tuve, nos pusimos a mezclar cosas y a calentarlas hasta que uno de esos tubos exploto..entonces ya lo dejamos..yo creo que era bastante peligroso para ser un juego en el que tienes que encender fuego.
ResponderEliminarEn España lo tuve en los 60, el susto que se llevo mi primo , aún lo recuerdo en mi primer experimento
ResponderEliminarLos productos eran peligrosos y tóxicos. Hasta enseñaba a hacer pólvora. Con mis amigos casi quemo la casa.
ResponderEliminarYo hice muchos experimentos, y aprendí mucho, hasta híce la barbaridad de tomarme un sorbito de un bebestible que no me puso malo (menos mal). Muchos productos los compraba en la farmácia, así como tubos de ensayo, y no había problemas, nada que ver con ahora por culpa de los terroristas. Una vez calenté cristales de yodo y salió un humo violeta que tiznó un trozo del techo de la habitacion. Vivito estoy,ya tenía cuidado y fuí muy Feliz en mi niñez.Ahora los hijos juegan con maquinitas (móviles, ordenador, consolas,...), y se vuelven irascibles, tienen obesidad y la educación deja mucho que desear. Antes era más sano jugar en la calle, con pandillas de amigos y amigas, eramos responsables y no teníamos que ir al psicólogo. Y los padres eran un ejemplo a seguir. Tiempos pasados fueron mejores
ResponderEliminarYo hice muchos experimentos, y aprendí mucho, hasta híce la barbaridad de tomarme un sorbito de un bebestible que no me puso malo (menos mal). Muchos productos los compraba en la farmácia, así como tubos de ensayo, y no había problemas, nada que ver con ahora por culpa de los terroristas. Una vez calenté cristales de yodo y salió un humo violeta que tiznó un trozo del techo de la habitacion. Vivito estoy,ya tenía cuidado y fuí muy Feliz en mi niñez.Ahora los hijos juegan con maquinitas (móviles, ordenador, consolas,...), y se vuelven irascibles, tienen obesidad y la educación deja mucho que desear. Antes era más sano jugar en la calle, con pandillas de amigos y amigas, eramos responsables y no teníamos que ir al psicólogo. Y los padres eran un ejemplo a seguir. Tiempos pasados fueron mejores
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